Las joyas que elijas no deben en ningún caso restarte protagonismo; por ello lo mejor es que sean lo más discretas posibles aunque pueden ser un complemento muy brillante para completar tu look de novia.
Quizás te preguntes ¿cómo escojo aquellas joyas que vayan mejor con mi vestido y con el peinado que voy a llevar el día de la boda?
¡No te preocupes!
Toma nota de los siguientes consejos:
En cuanto al collar, si tu vestido tiene escote palabra de honor o similar, es decir, sin tirantes, puedes elegir el collar que quieras: asimétrico, redondo o a ras de cuello; todos los estilos te sentarán bien.
El escote, ¿es en pico?, te aconsejo en este caso un collar cuyo largo máximo sea la mitad entre la base del cuello y el punto más bajo de tu escote.
Si tienes cuello alto o es más bien cerrado, lo mejor será que no utilices collar. Decántate por otros complementos; evitarás así verte sobrecargada.
¿Tu vestido tiene escote en la espalda? Podrás elegir collares especiales que la adornarán de manera muy sensual.
En el caso de que los tirantes sean anchos es mejor que el collar sea discreto.
Ten siempre en cuenta que si el vestido que has elegido tiene encaje, perlas, o cualquier otro adorno llamativo lo mejor es que no utilices collar. Como alternativa adorna tu cabello con una tiara, diadema o broche; resultará mucho menos recargado y más elegante.
A la hora de elegir pulseras o brazaletes, si el vestido no tiene mangas o sus tirantes son finos y a la vez es discreto, un bonito brazalete de perlas te quedará ideal.
También son tendencia las pulseras de brillantes o con un cierto toque antiguo, incluso aquellas que realmente son herencia de familia. Conseguirás así un estilo “vintage” tan de moda en la actualidad. Sea cual sea la decisión que tomes, lleva las pulseras siempre a juego con el resto de las joyas.
Cuando vayas a escoger los pendientes ten muy en cuenta el tipo de peinado que hayas elegido para la ocasión .
¿Vas a recogerte el cabello? Entonces te sentarán muy bien unos pendientes cuyo largo no sea excesivo o unos pendientes botón.
Si por el contrario vas a llevar el pelo suelto o semi-recogido, lo ideal será que utilices unos pendientes largos pero que no superen en ningún caso los tres centímetros de largo.
Algo importante a tener en cuenta es que si el collar es muy llamativo los pendientes tienen que ser discretos y viceversa.
En cualquier caso hay una serie de reglas comunes a cualquiera de los complementos anteriores:
– Si el vestido es sencillo la joyería puede ser más elaborada o llamativa.
– Si es más sofisticado las joyas deben ser sutiles y simples, pero no te preocupes, no por ello dejarán de ser igualmente elegantes.
– Una novia no llevará nunca ni reloj ni ningún otro anillo que no sea el de compromiso, y éste debe ponerse siempre en la mano izquierda para no coincidir con la alianza.
¿Sigues teniendo dudas y no estás segura de si las joyas que has escogido son excesivas?
Hay un truco que consiste en colocarte todas las joyas de espaldas a un espejo. Cuando estés lista date la vuelta hacia éste de repente; si a primera vista hay algo que te llama excesivamente la atención ¡quítatelo!
Si aun así estás indecisa y no sabes qué joyas escoger, elige simplemente unos pendientes sofisticados, ya que ésta es la pieza imprescindible para todas las novias y estarás totalmente perfecta.
Una buena idea es que te pongas las joyas en una de las pruebas del vestido y si puede ser también con el peinado que llevarás. Así verás todo el conjunto y te será más fácil tomar una decisión u otra.
Es conveniente que tengas en cuenta también el color de tu vestido de novia a la hora de decidir el tono de las joyas. Si el vestido tiene un tono blanco puro no le irán bien las joyas doradas; escoge entre la plata, oro blanco, joyas tipo cristal o platino. Si es blanco aperlado, combinará tanto con dorados como plateados. Las joyas doradas quedarán fabulosas con un vestido en tono marfil o champagne, pero nunca lo combines con joyas plateadas.
Como conclusión a toda esta serie de consejos y como máxima que debes tener siempre en cuenta a la hora de escoger tus joyas, acuérdate siempre del dicho que dice que ¡menos, es más!
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